Me encuentro en esta gran obra de arte, la vida, en la que cada uno de nosotros jugamos un papel importante aportando pinceladas de color únicas e inigualables. Pinceladas que ayudan a crear una obra sin fin donde nuestro alma dirige la esencia y la dirección siguiendo los estereotipos marcados o creando nuevos por voluntad. Y es que el ser humano se encuentra en una constante evolución siguiendo patrones preestablecidos influidos por líderes naturales que nos hacen seguir una corriente u otra.

Nada más nacer, se abre el telón de nuestra vida, en la que los padres ayudan a dibujar las primeras pinceladas y nos hacen un boceto para las futuras. Se convierten en nuestra referencia para avanzar, para conseguir nuestros objetivos más tempranos. Pero según van pasando los años, te das cuenta que avanzas más rápido adquiriendo la necesidad de dirigir tus propios pasos y dibujar tu propia existencia.

Tus marcas personales van dejando rastro, una senda de experiencias y cultura que crean tu propia personalidad.

Aunque para ello es necesario que te tropieces varias veces y aprendas, es necesaria una madurez, la cual si sabes gestionar correctamente te llevará a la «autorrealización», una de las mayores aspiraciones del ser humano.  Este proceso conlleva varios pasos que podemos identificar de la siguiente manera:

1. NACIMIENTO
2. Pautas básicas maternas y paternas : los padres son la primera referencia que tenemos nada más nacer y los que nos enseñan normas básicas.
3. Aprendizaje a través de la educación.
4. Socialización en la unión en grupo.
5. Estereotipos y prejuicios que aprendemos por defecto, pues se encuentran inmersos en la sociedad.
6. Errores en los que se encuentra la clave para avanzar y seguir adelante así como aprender cómo no cometerlos y seguir evolucionando. En tu mano está también eliminar los prejuicios y frenos.
7. Evolución positiva tras los errores, aprender de ellos y seguir adelante.
8. Madurez representa el proceso de transformación y adquisición de fuerza emocional tras los pasos anteriores.
9. Repetición y esfuerzo requiere auto-gratificarte todos tus logros personales y profesionales así como repetir procesos anteriormente satisfactorios.
10. AUTORREALIZACIÓN : felicidad creada por tu propio esfuerzo y evolución.

Cada uno de estos pasos conlleva su tiempo de adaptación pues depende en gran parte de la cultura y educación de la persona.

«En tus manos está que te quites prejuicios y tomes las riendas de tu vida, pudiendo dar pinceladas libres en armonía y terminar dibujando una obra de AUTORREALIZACIÓN.»